A la hora de elegir un router hay ciertos aspectos que, por una razón u otra, no terminamos de tener del todo en cuenta, lo que puede suponer una compra inadecuada que no satisfaga nuestras necesidades.
Dichos aspectos se pueden resumir en tres simples puntos, a partir de los cuales se hace conveniente la compra de uno u otro router, y son los siguientes:
- El tamaño de nuestra vivienda u oficina.
- La cantidad de usuarios o dispositivos que se vayan a conectar a la red.
- Nuestra velocidad de conexión.
Partiendo de estas bases podemos afirmar que si utilizamos una vivienda u oficina pequeña y va a haber pocos dispositivos conectados a la red lo ideal es, sin duda, elegir un router básico que, obviamente, nos permita aprovechar la velocidad de nuestra conexión.
Si por el contrario lo vamos a utilizar en una vivienda u oficina de gran tamaño y con muchos dispositivos conectados lo ideal es un router Wi-Fi AC de doble banda, ya que con ello evitaremos depender de la banda de 2,4 GHz que, recordamos, suele estar bastante saturada.
En este sentido los routers con tecnología SmartBeam de D-Link y soporte de Wi-Fi AC son una solución altamente recomendable, ya que consiguen mantener un gran rendimiento llegando incluso a los rincones más lejanos y trabajan en doble banda.
Antes de terminar es importante destacar que los routers de doble banda y Wi-Fi AC también son totalmente recomendables, en cualquier caso, para tareas exigentes y de alto rendimiento.
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